Desde hace aproximadamente tres meses, una pandemia que no esperaba la sociedad, acostumbrada a las agendas programadas y a un futuro planeado, sorprendió las dinámicas sociales y cuestionó nuestra relación con los demás seres de la creación, así como con Dios. Hubo inclusive posturas que, bajo el pretexto de eludir la propia responsabilidad, buscaron culpables hacia afuera y Dios no se salvó de los cuestionamientos. Esto puso en evidencia la necesidad de evangelizar, formar y servir a los más necesitados en estos tiempos que se viven. Los Eudistas de El Minuto de Dios sorprendieron a la Iglesia y a la sociedad colombiana en general por su capacidad de liderazgo y de una espiritualidad arraigada profundamente en Jesucristo.

Ante todo, han leído los signos de los tiempos y, en una profunda comunión espiritual, se han entregado totalmente a las necesidades de los hermanos, manifestando que la suma entre su ser y su quehacer los hace misioneros de la misericordia, enviados por el Padre de las misericordias, para distribuir los tesoros de su misericordia, a ejemplo de san Juan Eudes. Esta convicción de opción preferencial por los pobres, no en sentido de obligación moral, sino de amorosa entrega como lo hizo Cristo, les permitió explorar y profundizar en nuevos medios para estar cerca de sus comunidades, entre los que sobresalieron los medios digitales y todo el ámbito de la cultura digital en la que se mueven muchas de las comunidades.

Desde tempranas horas, muchos ya están evangelizando y formando a través de la Emisora Minuto de Dios, como es el caso del padre Fidel Oñoro con su programa centrado en la Sagrada Escritura; a lo largo de la mañana se pueden encontrar en las plataformas diferentes maneras de fortalecer la evangelización y la formación: La Eucaristía ocupa un lugar central en las diferentes comunidades y en la comunión con muchas personas deseosas de encontrar en el Señor su fortaleza y su esperanza. Así, por ejemplo, a las siete de la mañana pueden verse simultáneamente varios eudistas transmitiendo la Eucaristía por la Emisora Minuto de Dios, en la Parroquia San Juan Eudes o simplemente al interior de las comunidades locales. También se ejerce acompañamiento espiritual, como es el caso de Un sacerdote eudista te acompaña u otras iniciativas a nivel personal que generan un clima de cercanía y compañía espiritual.

La pandemia no es límite para los Eudistas de El Minuto de Dios
Padre Fidel Oñoro/Edudistas MD

En horas del mediodía día varias de las comunidades se conectan para el rezo del santo Rosario o para participar de otras actividades espirituales. Igualmente, al caer la tarde, comunidades como San Juan María Vianney, Michel Gérard, Rafael García Herreros, de Nicaragua, Nuevo Pentecostés, Espíritu Santo o Nuestra Señora de la Esperanza, proponen a los participantes la Eucaristía y otros espacios de formación y evangelización bajo el compromiso de sacerdotes que viven en estas comunidades.

Sin embargo, el carisma no solamente se ha involucrado en las dinámicas virtuales; por el contrario, un grupo grande de hermanos en el silencio “virtual” de sus iniciativas, han dedicado este tiempo a un servicio generoso a sacerdotes y laicos, en quienes encuentran al mismo Cristo. Y esto no solamente aplica para los eudistas incorporados: muchos candidatos y un gran grupo de asociados, amigos y colaboradores de El Minuto de Dios han tomado la bandera del servicio y la entrega desinteresada.

Todas las comunidades: Rafael García Herreros (Nicaragua); Espíritu Santo (Arequipa); Virgen de la Délivrande (Buga); Nuestra Señora de la Esperanza (Popayán); Cristo Evangelizador – Formador

(Medellín); Verbo Encarnado (Villavicencio); Jesús Buen Pastor (Neiva); Rafael García Herreros, Arturo Echeverry, Casa de la Comunidad, Carlos Eduardo Acosta, San Juan Eudes, Nuevo Pentecostés, Michel Gérard, Casa de Formación (en Bogotá); San Juan María Vianney (Bucaramanga) y Germán Villa Gaviria (Barranquilla) han hecho que los Eudistas, como evangelizadores, formadores y servidores de los pobres, tengan un impacto en Colombia desde las obras, parroquias y grupos de oración que acompañan, especialmente desde la Renovación Católica Carismática